Se fue la segunda. Y el 19 de noviembre llega el combate final: el balotaje entre Sergio Massa y Javier Milei.

La primera conclusión tras el imprevisto resultado en las elecciones presidenciales del domingo es el triunfo del candidato del oficialismo. En los últimos días, las encuestas que manejaba Massa indicaban una paridad con Milei, con una pequeña ventaja.

Ante un panorama de altísima inflación, dólar blue por sobre los 1000 pesos y diversos problemas económicos, parecía poco creíble. Las encuestas, sin embargo, no solo se terminaron confirmando la diferencia a su favor, sino que el candidato de Unión por la Patria (UxP) terminó sacándole casi 7 puntos al libertario.

Anoche, inmediatamente después de conocerse los resultados, los principales operadores del massismo esperaban un dólar más tranquilo. Lo que ocurra en la semana dependerá de las decisiones que tome Massa. Este lunes, por ejemplo, el titular del Palacio de Hacienda le pagará al Fondo Monetario Internacional con el objetivo de bajar el ruido cambiario. El resultado positivo, además, le da oxígeno al Gobierno para seguir retrasando una devaluación del dólar oficial.

En la otra vereda, Milei ya activó conversaciones para conseguir un acuerdo formal con el PRO. Su interlocutor es Mauricio Macri. Y si bien la relación entre ellos es óptima, hay muchas dudas respecto de si todos los dirigentes van a acompañar o no en forma unánime. Las dudas, lógicamente, se extienden al resto de los partidos que integran Juntos por el Cambio.

Aparentemente, en una cumbre de Bullrich con Mauricio Macri, Patricia Bullrich, Jorge Macri, Horacio Rodríguez Larreta y María Eugenia Vidal en la previa de las elecciones, todos habrían acordado ratificar la unidad y la orientación de la coalición y que no se abrieran puentes con Milei, fuera cual fuera el resultado.

Sin embargo, según pudo saber TN, en el medio hubo un segundo encuentro entre Mauricio y Patricia durante el cual se cambió un poco lo acordado. Esto generó mucho ruido a nivel interno y la derrota acentuó la crisis en Juntos por el Cambio. Salvo en la Capital Federal, a nivel presidencial, no ganó en ningún distrito.

En la UCR ya pusieron el grito en el cielo. Gerardo Morales cruzó a Mauricio Macri y se retiró del escenario cuando Bullrich dejó entrever la posibilidad de un acuerdo con Milei. Otros radicales ni siquiera subieron al escenario. Todo parece a punto de implosionar.

Cada vez son más los dirigentes opositores que señalan la estrategia del expresidente: dicen que la elección estaba “ganada” el año pasado, y adjudican la derrota a una interna feroz que, entienden, generó Macri.

Fuente: TN