El líder de la Coalición Cívica ARI, José María Albizo Cazón (23), comparte la importancia de la instalación de un crematorio en el ejido provincial, pero pide evaluar rigurosamente su ubicación en tanto la emanación de descargas tóxicas que éste produce pueden perjudicar a la salud conforme considera “hoy no están dadas las garantías de seguridad para la población que colindaría con el proyecto”, pudiendo ser ésta según informes que recibió, afectada con: “dioxinas, furanos, cloruro de hidrógeno, mercurio, cadmio, plomo, óxido de azufre, óxidos de nitrógeno, monóxido de carbono y partículas de distinto diámetro”.

El joven político manifestó su preocupación ante el anuncio de inminente ejecución de un crematorio en inmediaciones del Cementerio de El Salvador, en tanto considera a la fecha según tuvo conocimiento “no hubo un otorgamiento de factibilidad ambiental que permita hablar ya del desarrollo de tal iniciativa, y si existiese tan presurosamente, evidentemente hay un apuro bárbaro, que ni permitió exista sometimiento a observaciones y/o audiencias”.

Sentándose entre otras normativas en apreciaciones de la Convención de Estocolmo sobre Contaminantes Orgánicos Persistentes, siendo éste uno de los marcos regulatorios más importantes sobre la emisión de dioxinas de los crematorios, Albizo Cazón expresa que “no representa ésto una oposición al crematorio, sino a su ubicación, en tanto aún existan otros hornos instalados en perímetros urbanos, se debe ser rígidos con la observancia de los proyectos para evitar efectos nocivos en la salud de la población, y en éste caso quienes se encuentren en cercanía a la propuesta municipal se verían gravemente expuestos a gases y partículas tóxicas”.

También, se suma como argumento a éste proyecto que debe ajustarse al la Ley Nacional de Residuos Peligrosos, la posición del Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente, que señala a los crematorios como una “fuente importante” de mercurio, siendo la exposición a el -incluso en pequeñas cantidades- causante de graves problemas de salud, y potencialmente peligroso tanto para el desarrollo intrauterino, como de lactantes y niños.

“Sin importar la tecnología que se aplique, estamos hablando de la instalación de un foco de descargas contaminantes a menor o mayor grado, por lo cual estaremos a disposición de buscar la mejor resolución en pos de mitigar todo perjuicio tanto al ambiente como a la salud de los vecinos, ya sea defendiéndolos en instancias administrativas o de otra índole”, manifestó el exponente de la CC-ARI.