Participaron los colaboradores con mayor antigüedad, la institución agradeció por un año colmado de actividades e interacciones con los comprovincianos y pidió paz y prosperidad para todo nuestro pueblo.

Cada componente de La Casa, acercó lo que estuvo a su alcance, dando forma a un ritual completo y colorido: semillas, frutos, coca, vino, empanadas, bollos, tabaco, fueron algunas de las ofrendas con las que se le rindió culto a la Madre Tierra.

De esta forma, uno de los rituales más sentidos de Jujuy, tuvo presencia en la apacheta que se encuentra en la Representación Oficial de la Provincia en Buenos Aires.