El concejal Julio Mamaní del FIT criticó las mismas por otorgar superpoderes al intendente para achicar el municipio y atacar a los trabajadores, mientras se aumentan los impuestos afectando a los que menos tienen.

La Ordenanza de Emergencia Económica, Financiera, Fiscal, Administrativa y Social, fue aprobada el viernes pasado en el Concejo Deliberante de Palpalá a propuesta del intendente recién asumido Rubén Rivarola (h) del Frente de Todos. La ordenanza de Emergencia establece las condiciones necesarias para avanzar en una reestructuración y achicamiento del ejido municipal a gusto y semejanza de lo que defina el hijo del presidente del Partido Justicialista de Jujuy.

La Ordenanza, que contó con los votos de todos los diputados de la UCR/Frente Unidos por el Cambio y la mayoría del Frente de Todos, otorga más poderes al ejecutivo para reestructurar y minimizar el funcionamiento del municipio, y redefinir nuevas condiciones laborales que atenten contra derechos adquiridos de las y los trabajadores generando relaciones laborales más flexibles y precarias. El intendente decidirá sobre las prioridades y políticas del municipio en el marco de la emergencia declarada como también la toma de deudas, refinanciamiento de las mismas y préstamos.

Los puntos más controvertidos de la Ordenanza de Emergencia son:

El intendente podrá crear, modificar y cerrar direcciones o áreas municipales, esto puede implicar que la comunidad de Palpalá deje de contar con servicios municipales que la intendencia no consideren prioritarios. El cierre o la modificación pone en riesgo la continuidad laboral de quienes llevan adelante las tareas.

 Se podrá establecer y modificar las jornadas laborales y tareas de las/los trabajadores, y sus horarios de trabajo. La intendencia podrá redefinir cronograma de vacaciones y licencias. También afectará personal de otras áreas para la Dirección Municipal de Rentas. Un aspecto muy grave es que el intendente podrá establecer un nuevo régimen de contratación y prestación de servicios de las y los trabajadores municipales, lo cual podrá implicar ataques a los derechos adquiridos.

 Entre las acciones y tareas de emergencia se promoverán la realización de obras comunitarias a través de consorcios de autogestión y/ o cooperativas para la creación de fuentes de trabajo, lo cual implicaría la promoción de diversas formas de precarización y flexibilización laboral.

 Se podrá redefinir usos o modificar la asignación de presupuestos para determinadas áreas para los fines que el intendente defina como parte de la Emergencia, lo cual permite un manejo arbitrario delos recursos municipales.

Emergencia con más impuestazos

Mientras Rivarola garantiza su Ordenanza de Emergencia para avanzar con un plan de ajuste dentro del municipio, también consiguió la aprobación de otra Ordenanza impositiva que establece un aumento de impuestos municipales del 20%. Salvo Julio Mamaní, concejal del FIT en Palpalá que se opuso ambas ordenanzas, el resto de las y los concejales (del Frente de Todos y Juntos por el Cambio) dieron su aval para aumentar los impuestos a las familias trabajadoras y la juventud que ya tuvieron que afrontar impuestazos durante los meses que pasaron bajo la intendencia del radical Palomares y de Morales en el transporte, luz, gas, y otros servicios.

“La Ordenanza de Emergencia en Palpalá de Rivarola muestra claramente las intenciones del Frente de Todos que consigue obtener superpoderes para avanzar con el achicamiento de los gastos del municipio, afectar derechos de los trabajadores municipales precarizando aún más sus trabajos…” afirmó el concejal de la izquierda.

Tambien sostuvo que “… no hay que olvidarse que el intendente Rubén Rivarola hijo, su padre, diputado provincial y presidente del PJ, además de políticos y funcionarios son empresarios, y en Palpalá tienen varios negocios como la Clínica Fátima o la distribuidora de bebidas, para ellos, los grandes empresarios, no hay ninguna emergencia ni achicamiento, ni impuestazos, todo lo contrario..." "...queda demostrado que a la hora de atacar a las mayorías lo hacen a la par con concejales y diputados de Juntos por el Cambio, ya lo vimos en la Legislatura provincial cuando se votó el presupuesto de ajuste propuesto por el gobernador, o como ocurrió recientemente en el Congreso y el Senado de la Nación donde fue el Frente de Todos aplicó una Ley de Emergencia a pedido del FMI, afectando a jubiladas y jubilados, y beneficiando a especuladores, banqueros y petroleras…”.

Para finalizar Julio Mamaní afirmó que “… desde el Frente de Izquierda cuestionamos y nos opusimos a estas ordenanzas de ajuste. Vamos a insistir con la Ley contra los despidos y las suspensiones que fue vetada por Palomares, como también el pase a planta permanente de todos y todas los municipales. Ante la carestía de la vida seguiremos proponiendo la anulación de los tarifazos retrotrayendo a noviembre del 2017 las tarifas en el caso del transporte, luz o agua, y también los impuestos municipales… Vamos a apoyar todas las medidas de lucha que definan trabajadoras y trabajadores municipales y los sindicatos en defensa de sus derechos…”.